¿Listos para reservar su primer crucero? Si estás buscando consejos y sugerencias para hacer que la experiencia sea mucho mejor, ¿quién está más calificado que los viajeros de cruceros por primera vez que acaban de regresar de sus primeros viajes?
Honduras Magazine USA, se dio la tarea reunir los mejores consejos de ambas partes: tres de principiantes y tres de “seagoers” incondicionales. Lo que no sabían, y aprendieron de la manera difícil, sobre el embalaje, los cócteles, los puertos y la comida son lo más importante.
- Investiga los puertos en dónde atracarás
Es sabido que todo lo que necesitarás en el viaje (comida, diversión, camarotes, puertos) está perfectamente organizado a detalle y tu único trabajo es desembolsar la tarjeta de crédito, ¿cierto? Aunque casi, no es así. Yuritzy, una viajera experimentada, advirtió sobre el «crucear a ciegas», especialmente cuando se trata de los puertos; «Lee todo lo que puedas antes de tu crucero… de lo contrario, podría terminar en un puerto de tamaño considerable, especialmente en Europa, abrumado y sin la menor idea de qué hacer durante las próximas ocho horas».
- No “dobleteen” las propinas
Aaron, «un ex tipo de la Marina que no sabe nadar», y su esposa, Elma, aprendieron esto en su primer crucero, que fue un viaje de luna de miel para la pareja con sede en Caribe: «Ya estás pagando propinas automáticamente cuando compras una bebida en el bar. Ahora no me importa dar propinas…
De hecho, la mayoría de las grandes líneas de barcos (Carnival, Royal Caribbean, Norwegian y otras) incorporan automáticamente un cargo por servicio del 15 por ciento a las facturas de los bares. Obtén más información sobre las políticas de propinas, las páginas digitales de las líneas de cruceros.
- Empaca compacto e inteligente
Narda, navegando en su primer crucero, hizo algunos descubrimientos importantes durante su introducción a este tipo de viajes, uno de los cuales involucró un fuerte aguacero durante una escala en el puerto de Roatán, Honduras. El clima tropical del Caribe es volátil, así como los cambios del puerto de salida como los de visita, por lo que recomendamos colocar en lo más alto de sus listas, artículos imprescindibles es una chaqueta o poncho liviano e impermeable.
- Trabaja en el buffet de todo lo que puedas comer
Siendo un tipo con mucho trabajo, deportista y poco tiempo para el ocio, Pedro recientemente fue en su primer crucero. Al igual que muchos primerizos, había oído hablar de pasajeros que perdían el régimen alimenticio y llegaban a aumentar unos kilos. Pero, ¿cómo pueden los cruceros equilibrar la ingesta (variados cortes, salsas de crema, postres y lo mejor, que ofrecidos sin límite 20 horas al día) con problemas de salud? Si lo tuyo es el ejercicio, ve al gimnasio del barco o inscríbete en una clase de Spinning o Yoga para quemar más rápidamente esas comidas buffet extra grandes. Eso sin mencionar que los destinos de los puertos que visites ofrecerán diferentes actividades físicas.
- Evite el buffet el día del embarque
Si bien el día de desembarque ciertamente se clasifica como el peor día del crucero, el día de embarque lo sigue por poco. Para muchos, comienza con una sacudida de la cama temprano en la mañana, para otros llegar de uno o más viajes y continúa con una larga estadía en el puerto y concluye con muchos movimientos de pulgares en una terminal sombría y sin comodidades. Todo este tiempo y maniobras previas al crucero hacen que el apetito se “dispare” y una vez a bordo, comienza la loca carrera hacia el buffet.
Nota: No todas las líneas abren sus comedores para el almuerzo el día del embarque.
- Diseña tu recorrido por el crucero previo al embarque
Para un principiante, la perspectiva de navegar en un mega barco de 3.340 pasajeros y 15 cubiertas puede ser abrumadora. Marisa, una residente de Yucatán que ha estado en 6 cruceros, tiene una solución cerca de infalible. Unos días antes del embarque, consigue el mapa del buque por internet y crea su propio recorrido en barco, recopilando información sobre el paradero de salones y restaurantes alternativos, de planes de cubierta de cruceros, tableros de mensajes y revisiones de barcos. Así, mientras otros deambulan sin rumbo en su primer día a bordo, Marisa, su marido a cuestas, recorre el barco como un viejo profesional.